martes, 24 de febrero de 2009

Síntesis Final: PADRE NUESTRO (Soneto con estrambote)

PADRE NUESTRO


Tantas veces, te dije Padre mío,
que Padre nuestro, a Ti, mi voz hoy clama
y, en mi voz, siento arder también la llama
del fuego de mi pecho, ayer vacío.

Aunque estás en el Cielo, aquí porfío
el Reino que la Tierra te reclama:
tu Justicia, Señor, que amor inflama,
tu Vida y tu Verdad... ¡En Ti confío!

Glorificado sea tu nombre santo
si, cuando parta el pan, mi pulso es fuerte.
¡Perdóname!,... si te he ofendido tanto,

como a otros yo perdono de igual suerte.
Y, si librarnos no puedes del llanto,
¡líbranos ya, Señor, de eterna muerte!

Te lo pido por nuestra santa Madre
que, amorosa, nos besará en la frente.
Alphonso CARBAJAL


A cuantos, además de hombres, tratan
de ser cristianos y, muy en
especial, a mí mismo

2 comentarios:

Alicia Abatilli dijo...

Es un Padre Nuestro personal pero tan mío, tan del otro, tan tuyo.
Un abrazo.
Alicia

Alphonso Carbajal de La Legua dijo...

Sí, Alicia, es de todos y para todos, pero lo importante, lo más importante, no es decirlo, o "rezarlo". Lo definitivo y concluyente es vivirlo.Te deseo que tu puedas siempre vivir así. Un beso.